Una de las cosas más importantes en el proceso de aprendizaje es tener a buen recaudo todo el material de estudio, y así, evitar pérdidas indeseables que podrían tener consecuencias nefastas.
Priméra página autógrafa de La Pasión según San Mateo (Johan Sebastian Bach)
Un claro ejemplo histórico de pérdida de material se refleja en la leyenda sobre el descubrimiento de la partitura en la que, el gran genio del barroco Johan Sebastian Bach (1685-1750), perpetuó una de sus obras maestras: La pasión según San Mateo.
Dice la leyenda que fue Felix Mendelssohn (1809-1847) quien, acompañando un día a su madre a la carnicería, comprobó como el carnicero envolvía la mercancía en papel pautado lleno de notas manuscritas. El carnicero explicó que se había encontrado gran cantidad de «papeles como ese» en una buhardilla que acababa de alquilar.
Lo más seguro es que esta historia no sea cierta, pero sí que es cierto que Bach, el genio, fue un desconocido para la humanidad hasta que no fue devuelto a la humanidad por Felix Mendelssohm.